martes, 29 de enero de 2013

¿ARE YOU READY?

Cuando el buscar trabajo ocupa gran parte de tu rutina diaria, cuando lees cada oferta que te puede interesar y cuando al leerla sientes como si algo te hiciese chiquitillo, al ver que piden tantas cosas que piensas, qué has hecho todo este tiempo que no tienes ni la mitad de cosas de lo que piden… Pero a los cinco minutos decides reponerte,  y te animas a ti mismo, le echas la culpa a la crisis y alejas esos fantasmas que nos hacen pensar que no tenemos talento.
  Según un estudio de Manpower el 35% de los parados no ha realizado una entrevista de trabajo en el último año, el 46% ha participado en algún proceso de selección una, dos o hasta tres veces en un año, y el otro 19% lo ha hecho en más de tres ocasiones. Al leer este tipo de informaciones, nuestro pesimismo vuelve a aparecer  azotándonos de nuevo, y haciéndonos olvidar al YO VALGO  para recordarnos el NO ENCONTRARÉ NADA.  Hoy he conocido a una persona  con magia, de esas personas que realmente consiguen hacer que veas cuando tu ceguera te lo impide, ceguera que es el miedo al fracaso camuflado. Me ha parecido interesante, y por ello me gustaría compartir con los pocos que puedan leer esto, un pedacito de esa magia, porque quizás los que se encuentran desanimados y perdidos, en este camino duro y pesado de la “búsqueda de empleo” , puedan aunque sea por un rato, “ver entre tanta oscuridad”.
Ante todo, necesitamos reconocer nuestra imperfección, no somos perfectos, ni chicos diez, de hecho la excelencia es una utopía. Pero somos personas preparadas, la mayoría con una inteligencia media,  tenemos recursos dormidos de los que ni siquiera somos conscientes, entre otras cosas, porque es el momento en el que nos enfrentamos a las situaciones, cuando los utilizamos. Y sino, pensad cuántos de vosotros no os habéis dicho en alguna ocasión “pensaba que no iba a ser capaz, pero al final he podido”.  El enfrentarnos a situaciones complicadas, hace sacar los mejor de nosotros mismos. Necesitamos creer, necesitamos el ensayo error para conseguir esa experiencia, y no en un puesto de trabajo, sino experiencia en la vida, en saber que la esperanza y la ilusión son el motor que nos mueve cada día, y a ser conscientes de que dentro de nuestras cabezas, puede estar una gran idea a punto de ser descubierta.
Precisamente ayer leí un artículo, era una entrevista a la empresaria Catalina Hoffmann, socia fundadora y consejera  de la cadena de franquicias Vitalia, a la que le han otorgado el premio emprendedores a Pyme 2012. Ella montó la empresa con tan sólo 26 años, contaba que mucha gente la intentó quitar la idea de la cabeza, porque no era, según los bien avenidos, una idea viable. Y como bien dice esta empresaria de éxito, cuando uno dice que quiere hacer sus sueños realidad, mucha gente te dirá que es un imposible, y que lo que hay que hacer es no escucharles, o escucharles, pero no hacerles caso.
Os dejo un vídeo,  es un fragmento de la película “En busca de la felicidad”, que nos recuerda que no podemos permitir que nadie nos diga lo que no podemos hacer.



                               Cada uno será lo bueno que quiera ser.(Paul Arden)

miércoles, 23 de enero de 2013


LA BOLSA

La manera más sencilla de entender este concepto es hacernos a la idea de que La Bolsa es un mercado donde una serie de compradores y vendedores  se ponen en contacto para negociar la compra de una serie de productos. En este caso los productos son Valores, Materias Primas, Bonos, Divisas, Opciones, Créditos, Deudas y Derivados. Este tipo de mercados está abierto para todo aquel que esté interesado, la diferencia frente a un mercado convencional está en que para poder participar en el mercado, necesitaremos trabajar con una corredora, que será la que realice las gestiones por nosotros, a cambio de una comisión. Esto lo vemos a menudo cuando alguien quiere comprar acciones y por ejemplo, acude a su entidad bancaria para que ésta procese la operación.

Los países dan tanta importancia a las Bolsas porque cumplen una función muy significativa en el crecimiento de una economía ya que canaliza el ahorro hacia la inversión productiva, y vamos a ver por qué.
Las empresas, organismos públicos y/o privados cuando necesitan recursos para poder llevar a cabo sus actividades(adquirir bienes de equipo sería una opción) tienen varias opciones para poder conseguirlos, una de ellas es acudir a la Bolsa y  vender sus activos financieros(entre los que se encuentran acciones, bonos, obligaciones etc.) en lugar por ejemplo de pedir un préstamo bancario. Por otro lado, están los llamados ahorradores (tanto instituciones como particulares) que desean obtener rentabilidad de sus ahorros o excedentes, y que eligen entre otras muchas alternativas de inversión que existen, acudir a comprar en Bolsa todos los productos que son emitidos por las empresas, organismos públicos y/o privados. Podemos decir que funciona como un instrumento de financiación para las empresas, organismos públicos y/o privados, y de inversión para los ahorradores, de ahí su importancia en una economía.

En el caso del mercado de valores mobiliarios (en aquel en el que se venden acciones, obligaciones, letras del tesoro, bonos, pagarés de empresas, títulos hipotecarios entre otros) la Bolsa ofrece a los compradores la posibilidad de convertir en dinero cuando lo deseen sus activos, favoreciendo así la liquidez en el sistema, lo que es muy importante para la realización de operaciones con diferentes horizontes temporales.

¿Y quién determina el precio de los productos?
En este tipo de mercado, el precio de los valores viene dado por la libre aproximación de la oferta y demanda siendo el precio de cada producto, un precio objetivo al reflejar lo que el mercado da por ellos. Para que este mecanismo de precios funcione correctamente debe haber una transparencia informativa, siendo la Comisión Nacional del Mercado de Valores la que ejerce una supervisión e inspección severa para que sea así. Los factores que pueden afectar a las bolsas pueden ser desde políticas económicas, incertidumbre política, la evolución de la economía global etc. Por ejemplo, En los momentos de euforia económica, la Bolsa responde con subidas, ya que las empresas obtienen mayores beneficios y su precio en el mercado bursátil se incrementa. Al mismo tiempo, bajan los tipos de interés, los ciudadanos disponen de más dinero y aumentan el ahorro y las inversiones  En los períodos de recesión, sucede todo lo contrario y los precios de los valores tienden a baja. Ahora mismo, todos estamos viviendo cómo el BCE mantiene una política de tipos de interés bajos, para conseguir animar a las economías de la eurozona.

Para terminar, quiero hablaros sobre el Ibex 35. Todas las bolsas de valores  tienen un índice que lo que hace es valorar  las acciones de las empresas que cotizan en un mismo mercado, y que pretende reflejar las variaciones en el valor o en la rentabilidad de esos valores. Para que os hagáis una idea, lo podemos ver como una "carta de presentación" del país para el resto de inversores.
En España tenemos  al IBEX 35,  formado por 35 empresas elegidas por el Comité Asesor Técnico(CAT) que es el que valora el peso de las empresas en el mercado bursátil y en función de la importancia que tengan, entrarán o no a formar parte del Ibex 35.El valor que tiene el índice,  lo vemos a diario en las noticias, cuando dicen  por ejemplo, que el Ibex ha cerrado hoy a 8.613 puntos. Es una ponderación matemática de lo que se llama la "capitalización bursátil" de las empresas que lo forman,  y corresponde al número de acciones en circulación multiplicado por el precio por acción. Por eso, podemos apreciar que no todas las empresas tienen el mismo peso en el Índice.

viernes, 4 de enero de 2013





La temida “Deflación”

Este término, quizás poco conocido para algunos, es cada vez más notorio en los artículos económicos de hoy en día. Por ello, me gustaría explicar en este artículo en qué consiste realmente y sus efectos en las economías.
La deflación consiste en una bajada generalizada y continuada (dos semestres seguidos según el FMI) de precios de los bienes y servicios de un país. Es lo contrario a la “Inflación” y suele venir motivada por una recesión, donde la oferta (lo que las empresas quieren vender) es mayor a la demanda (lo que los consumidores están dispuestos a comprar). Debemos entender, que el sector empresarial incurre en unos gastos que tiene que cubrir con sus ventas, si las ventas caen, se verán obligados a bajar el precio  y así conseguir dar salida a sus productos y no acumular stocks.
Después de grandes ciclos expansivos se producen excesos de capacidad, esto lo podemos ver reflejado en el sector inmobiliario, donde tras años de una producción desmesurada y con unos precios que no se ajustaban a la realidad de su valor, hoy hay miles de edificios vacíos  donde la diferencia tan significativa entre oferta y demanda ha obligado a un ajuste de precios importante, que a día de hoy ,no ha acabado.
El gran problema de la deflación es que provoca pérdidas en el sector empresarial, puesto que la bajada de precios continuada hace que las empresas no puedan cubrir sus costes, acarreando pérdidas a las empresas, y eso supone que haya una disminución de plantilla y una reducción en la inversión de los bienes de equipo, lo que a su vez vuelve a reducir la demanda en ese sector. Es un ciclo vicioso muy peligroso, que arrastra a un hundimiento de la economía de un país. Por eso, muchos economistas y expertos en materia macroeconómica, no ven factibles las políticas que se están aplicando en los países de la zona euro para conseguir una moneda más fuerte, ya que las medidas de austeridad que están llevando a cabo provocan una deflación prolongada.
Ya estudiamos cómo en la Gran Depresión se vivió un escenario de deflación severa, y qué llevó a ello, pero como dice Camille Sée(1847-1919) un político y abogado francés “Dicen que la historia se repite, lo cierto es que sus lecciones no se aprovechan